Es un tumor cutáneo de crecimiento lento que involucra cambios cancerosos en las células basales de la piel.
Úlcera roedora; cáncer de piel en célula basal; carcinoma de célula basal
El cáncer de células basales es la forma más común de cáncer en los Estados Unidos; representa cerca de un 75% de todos los cánceres de piel. La incidencia de cáncer en la piel ha aumentado de forma importante en los últimos años, debido en parte a una mayor exposición a la radiación ultravioleta del sol. En 1990, 600.000 personas recibieron el diagnóstico de cáncer de células basales o cáncer escamocelular, superior a las 400.000 que recibieron estos diagnósticos en 1980.
Las células basales son células normales de la piel que pueden desarrollar cambios cancerígenos, ocasionando una masa o tumoración indolora. Una masa cutánea nueva que se ulcera, sangra con facilidad y no sana podría indicar el desarrollo de un cáncer de piel de células basales. Este tipo de cáncer, si se trata a tiempo, tiene una alta tasa de curación, pero si se descuida, puede crecer causando posible discapacidad o, en raros casos, la muerte.
Más del 90% de los carcinomas de las células basales ocurren en áreas cutáneas regularmente expuestas al sol o a otro tipo de radiación ultravioleta, pero también pueden aparecer en el cuero cabelludo. Por lo general, el cáncer de piel de células basales se inicia después de los 40 años de edad.
Otros factores de riesgo son: la predisposición genética (el cáncer de piel de células basales es más común en aquellas personas de piel blanca, ojos azules o verdes, cabello claro o rojizo), la sobreexposición a rayos X u otras formas de radiación.
Por lo general, este tipo de cáncer permanece localizado y casi nunca se disemina a otras partes del organismo, pero puede continuar creciendo e invadir los tejidos y estructuras cercanas incluyendo nervios, huesos y cerebro. El tumor puede ser muy pequeño al comienzo hasta alcanzar de 1 a 2 centímetros de diámetro luego de varios años de crecimiento.
Para confirmar el diagnóstico de un carcinoma de célula basal es necesaria una biopsiade una lesión de piel sospechosa.
El tratamiento varía dependiendo del tamaño, profundidad y localización del cáncer.
El carcinoma se extirpa utilizando uno de los siguientes procedimientos:
El tratamiento temprano por parte de un dermatólogo puede dar como resultado un índice de curación de más del 95%. Puede haber nuevos lugares donde aparezca el cáncer de célula basal, por lo que se debe ser diligente con el monitoreo. El médico debe realizar exámenes con regularidad.
Una complicación del cáncer de célula basal es la invasión de los tejidos o estructuras adyacentes, causando daños a su apariencia y funcionamiento. Esta condición es más preocupante cuando se presenta alrededor de la nariz, ojos y orejas.
Se debe buscar asistencia médica si ocurre algún cambio en el color, tamaño, textura o aspecto de una lesión cutánea o si se presenta dolor, inflamación, sangrado o prurito en una lesión cutánea existente.
La prevención involucra la reducción de la exposición al sol:
Se debe examinar la piel con regularidad buscando masas o cambios sospechosos en lesiones cutáneas ya existentes. Una masa nueva que se ulcera, sangra con facilidad y tarda en sanar es motivo de sospecha.
Los cambios sospechosos en masas existentes son: