Es un tumor lleno de moco en la superficie del cuello uterino.
El cuello uterino es parte del cuerpo femenino. Está en el extremo inferior de la matriz (útero) en la parte superior de la vagina y tiene aproximadamente una pulgada de largo.
El cuello uterino está recubierto con glándulas y células que secretan moco. Las glándulas pueden resultar cubiertas por un tipo de células cutáneas llamadas epitelio escamoso. Cuando esto sucede, las secreciones se acumulan en las glándulas taponadas, formando una protuberancia redonda y lisa sobre el cuello uterino, llamada huevo de Naboth.
Cada huevo de Naboth aparece como una protuberancia blanca y pequeña y puede haber más de una.
Durante un examen pélvico, el médico observará una pequeña protuberancia lisa y redonda (o grupos de protuberancias) sobre la superficie del cuello uterino. En raras ocasiones, se puede necesitar un aumento del área (colposcopia) para diferenciar estos quistes de otras protuberancias que se pueden presentar.
Algunas veces, se abre el quiste para confirmar el diagnóstico.
No es necesario tratamiento alguno, ya que los huevos de Naboth no causan ningún problema.
En raras ocasiones, se pueden abrir y drenar si son tan grandes que causan problemas con la forma del cuello uterino, lo cual puede hacer que los exámenes sean más difíciles.
Los huevos de Naboth no causan ningún daño. Son una condición benigna.
En raras ocasiones, los quistes pueden llegar a ser tan numerosos o grandes que el cuello uterino aumenta de tamaño o resulta obstruido, dificultando la toma de una citología vaginal.
Esta afección generalmente se descubre durante un examen pélvico de rutina.
No hay una forma de prevención conocida.