Es un defecto congénito en el cual algunas partes del páncreas no logran fusionarse. El páncreas es un órgano plano y largo localizado entre el estómago y la columna, y que interviene en la digestión de los alimentos.
El páncreas divisum es la anomalía congénita más común del páncreas y, en muchos casos, pasa inadvertida y no causa ningún problema. Su causa se desconoce.
A medida que el bebé se desarrolla en el útero, dos pedazos separados de tejido se juntan para formar el páncreas. Cada parte tiene un tubo, llamado conducto. Cuando las partes se juntan, se forma un conducto final, llamado conducto pancreático, a través del cual fluyen normalmente líquidos y químicos digestivos (enzimas) producidos por el páncreas.
Si los conductos no logran unirse mientras el bebé se está desarrollando en el útero, se presenta el páncreas divisum y el líquido proveniente de las dos partes del páncreas drena hacia dos áreas separadas de la porción superior del intestino delgado (duodeno). Esto se presenta en el 5 al 15% de las personas.
Si el conducto pancreático resulta obstruido, se puede presentar hinchazón y daño al tejido (pancreatitis).
Nota: a menos que tenga pancreatitis, no se presentarán síntomas.
Si usted padece esta afección y tiene síntomas o pancreatitis que sigue reapareciendo, el médico le puede recomendar una cirugía.
El pronóstico generalmente es bueno.
La principal complicación del páncreas divisum es la pancreatitis.
Solicite una cita con el médico si desarrolla síntomas de este trastorno.
Debido a que esta afección está presente al nacer (congénita), no hay ninguna forma conocida de prevenirla.
Forsmark CE. Pancreatitis. In: Goldman L, Schafer AI, eds. Cecil Medicine. 24th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2011: chap 146.