Es una protuberancia hacia afuera (protrusión) del revestimiento abdominal o de parte de los órganos abdominales a través del área alrededor del ombligo.
Una hernia umbilical en un bebé ocurre cuando el músculo a través del cual pasan los vasos sanguíneos para alimentar al bebé en desarrollo no se cierra por completo.
Las hernias umbilicales son comunes en los bebés y ocurren con una frecuencia ligeramente mayor en los bebés de raza negra. La mayoría de las hernias umbilicales no están relacionadas con ninguna enfermedad; sin embargo, pueden estar asociadas con afecciones raras, como la enfermedad de almacenamiento de mucopolisacáridos, el síndrome de Beckwith-Wiedemann, el síndrome de Down y otros.
Una hernia puede variar de menos de uno a más de cinco centímetros de diámetro.
Se presenta una hinchazón blanda sobre el ombligo cuando el bebé está sentado, llora o hace un esfuerzo. La protuberancia puede ser plana cuando el bebé está quieto y acostado boca arriba.
El médico puede encontrar la hernia durante un examen físico.
Generalmente, no se requiere tratamiento a menos que la hernia continúe después de la edad de 3 a 4 años. En algunos casos poco comunes, el tejido del intestino u otros tejidos pueden protruir y perder su riego sanguíneo (resultar estrangulados), lo cual es una situación de emergencia que requiere cirugía.
La mayoría de las hernias umbilicales mejoran sin tratamiento hacia la edad de 3 a 4 años y las que no cierren pueden necesitar cirugía. Estas hernias generalmente son indoloras.
El estrangulamiento del tejido del intestino es poco común pero grave y requiere de cirugía inmediata.
Llame al médico o acuda al servicio de urgencias si el bebé está muy irritable o parece tener dolor abdominal intenso o si la hernia se torna sensible, inflamada o se decolora.
No se conoce ninguna forma de prevenir una hernia umbilical. El hecho de drenar o "fajar" una hernia umbilical no hace que ésta desaparezca.
Carlo WA. The Umbilicus. In: Kliegman RM, Behrman RE, Jenson HB, Stanton BF, eds. Nelson Textbook of Pediatrics. 19th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2011:chap 99.