Se refiere al olor del líquido excretado durante la micción. El olor de la orina varía. Sin embargo, si una persona toma líquidos suficientes y aparte de esto es saludable, la orina normalmente no tiene un olor fuerte.
Los cambios en el olor de la orina son normalmente temporales y no siempre son una señal de enfermedad. Ciertos alimentos y medicamentos, entre ellos las vitaminas, pueden afectar el olor de la orina. Por ejemplo, el espárrago causa un olor de orina característico, debido a su contenido de asparragina, un aminoácido.
Sin embargo, el olor fétido de la orina puede deberse a bacterias, como las responsables de las infecciones de las vías urinarias. El olor dulce de la orina puede ser una señal de diabetes no controlada o una enfermedad rara del metabolismo. La enfermedad hepática y ciertos trastornos metabólicos pueden causar un olor de la orina a moho.
El olor anormal de la orina puede indicar:
Consulte con el médico si tiene fiebre, escalofríos, ardor con la micción o dolor de espalda junto con un olor de orina anormal, los cuales pueden ser señales de una infección de las vías urinarias.
Se pueden realizar los siguientes exámenes:
Landry DW, Bazari H. Approach to the patient with renal disease. In: Goldman L, Ausiello D, eds. Cecil Medicine. 24th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2011:chap 116.
Israni AK, Kasiske BL. Laboratory assessment of kidney disease: clearance, urinalysis, and kidney biopsy. In: Brenner BM, ed. Brenner and Rector's The Kidney. 8th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2007:chap 23.