Es una infección causada por el nemátodo Strongyloides stercoralis (S. stercoralis).
El Strongyloides stercoralis es un nemátodo bastante común en áreas cálidas y húmedas. En raras ocasiones, se puede encontrar en regiones tan septentrionales como Canadá.
Las personas contraen la infección cuando su piel entra en contacto con suelo contaminado con estos gusanos.
Este pequeño gusano es apenas visible a simple vista. Los gusanos pequeños se pueden desplazar a través de la piel de una persona hacia del torrente sanguíneo hasta los pulmones y las vías respiratorias.
Luego, suben hasta la garganta donde son ingeridos hacia el estómago. Los gusanos se desplazan luego hacia el intestino delgado, donde se fijan a la pared. Posteriormente producen huevos, los cuales eclosionan en larvas pequeñas que salen del cuerpo.
A diferencia de otros gusanos, estas larvas pueden ingresar de nuevo al cuerpo a través de la piel alrededor del ano, lo cual permite que la infección prolifere. Las áreas por donde los gusanos atraviesan la piel pueden tornarse rojas y dolorosas.
Esta infección es infrecuente en los Estados Unidos. La mayor parte de los casos vistos en Norteamérica son llevados por viajeros que han estado o vivido en Sudamérica o África.
La mayoría de las veces no hay síntomas, pero cuando ocurren pueden ser:
Se pueden llevar a cabo los siguientes exámenes:
El objetivo del tratamiento es eliminar los gusanos utilizando medicamentos antiparasitarios, como ivermectina o albendazol.
En algunos casos, se tratan personas sin ningún síntoma. Esto incluye a personas que toman fármacos para inhibir el sistema inmunitario.
Con un buen tratamiento, las personas deben recuperarse por completo y los parásitos deben eliminarse. Algunas veces, es necesario repetir el tratamiento.
Las infecciones que sean graves o generalizadas con frecuencia tienen un mal pronóstico, especialmente en pacientes con un sistema inmunitario debilitado.
Solicite una cita con el médico si tiene síntomas de estrongiloidiasis.
La buena higiene personal puede reducir el riesgo de contraer estrongiloidiasis. Los servicios de salud pública y las instalaciones sanitarias brindan un buen control de la infección.
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