Es un procedimiento que utiliza muchos rayos X para crear imágenes de la cabeza, incluyendo el cráneo, el cerebro, las órbitas o cuencas de los ojos y los senos paranasales.
TC del cerebro; TAC de la cabeza; TC del cráneo; Tomografía computarizada de la cabeza; TC de las órbitas; TC de los senos paranasales; Tomografía computarizada craneal
A usted se le solicitará que se acueste en una mesa estrecha que se desliza hacia el centro del tomógrafo.
Una vez que usted está dentro del escáner, el haz de rayos X de la máquina rota a su alrededor. (Los escáneres modernos en "espiral" pueden realizar el examen sin detenerse).
Una computadora crea imágenes separadas del área del cuerpo, llamadas cortes. Estas imágenes se pueden almacenar, observar en un monitor o imprimirse en una película. Se pueden crear modelos tridimensionales del área de la cabeza juntando los cortes.
Usted debe permanecer quieto durante el examen, ya que el movimiento ocasiona imágenes borrosas. Igualmente, le pueden solicitar que contenga la respiración por períodos de tiempo breves.
Generalmente, los exámenes completos toman sólo unos cuantos minutos. Los escáneres más nuevos pueden tomar imágenes de todo el cuerpo, de los pies a la cabeza, en menos de 30 segundos.
Ciertos exámenes requieren un colorante especial, llamado medio de contraste, que se introduce en el cuerpo antes de que el examen comience. El medio de contraste ayuda a que ciertas áreas se vean mejor en las radiografías.
Si usted pesa más de 300 libras (141 kilos), averigüe si el tomógrafo tiene un límite de peso. Demasiado peso puede causar daño a las partes funcionales del equipo.
A usted se le solicitará quitarse las joyas y ponerse una bata de hospital durante el estudio.
Los rayos X producidos por una tomografía computarizada son indoloros. Algunas personas pueden sentir incomodidad por el hecho de permanecer acostadas sobre una mesa dura.
El medio de contraste administrado a través de una vía intravenosa puede causar una ligera sensación de ardor, un sabor metálico en la boca y un calor súbito en el cuerpo. Estas sensaciones son normales y usualmente desaparecen al cabo de unos pocos segundos.
Una tomografía computarizada del cráneo se recomienda para ayudar a diagnosticar o vigilar las siguientes afecciones:
Una tomografía computarizada del cráneo también puede hacerse para buscar la causa de:
Los resultados anormales pueden deberse a:
Los riesgos de las tomografías computarizadas abarcan:
Las tomografías computarizadas en realidad lo exponen a uno a una mayor radiación que las radiografías regulares. El hecho de tomar muchas radiografías o tomografías computarizadas con el tiempo puede aumentar el riesgo de cáncer. Sin embargo, el riesgo de cualquier tomografía es pequeño. Usted y el médico deben sopesar el riesgo frente a los beneficios de obtener un diagnóstico correcto para un problema de salud.
Algunas personas tienen alergias al medio de contraste. Coméntele al médico si usted alguna vez ha tenido una reacción al medio de contraste inyectado.
En raras ocasiones, el medio de contraste puede ocasionar una respuesta alérgica potencialmente mortal llamada anafilaxia. Si usted presenta alguna dificultad para respirar durante el examen, debe notificárselo al operador del escáner inmediatamente. Estos aparatos traen un intercomunicador y parlantes, de tal manera que el operador puede escucharlo en todo momento.
Una tomografía computarizada puede disminuir o evitar la necesidad de procedimientos invasivos para diagnosticar problemas en el cráneo y es una de las formas más seguras para estudiar la cabeza y el cuello.
Otros exámenes que se pueden llevar a cabo en lugar de la tomografía computarizada del cráneo abarcan:
Shaw AS, Dixon AK. Multidetector computed tomography. In: Grainger RC, Allison D, Adam, Dixon AK, eds. Diagnostic Radiology: A Textbook of Medical Imaging. 5th ed. New York, NY: Churchill Livingstone; 2008:chap 4.
Saunders D, Jäger HR, Murray AD, Stevens JM. Skull and brain: methods of examination and anatomy. In: Grainger RC, Allison D, Adam, Dixon AK, eds. Diagnostic Radiology: A Textbook of Medical Imaging. 5th ed. New York, NY: Churchill Livingstone; 2008:chap 55.